Sin embargo con la de noviembre en Cataluña, ya van seis procesos electorales en aproximadamente un año, lo que quiere decir que se ha provocado una manifestación en las urnas desde distintos territorios y a nivel nacional, prácticamente como nunca en dicho periodo temporal.
Pero aún se ve lejos ese horizonte de elecciones generales y sin embargo muchos ciudadanos desearían volver a votar hoy mismo. Se siente que el programa electoral que muchos votaron en noviembre de hace un año, no es lo que se ha llevado a la práctica y lo que es peor, no atisban futuro con el nuevo planteamiento. Pero si votaran hoy mismo ¿valdría su voto para transformar el actual sistema?
En el cortoplacismo de los dirigentes del Gobierno se encuentra mucha improvisación y también
poca confianza. Lo que no se puede atisbar es ninguna reforma de calado sobre el modelo ni sobre la Constitución, ni siquiera sobre leyes en las que se asienta nuestra democracia, porque parece ser que el establishment es adicto a lo que se conoce como "chapa y pintura", en su forma de procesar la situación deben concluir que es tan complicado todo que mejor no liarlo más, cuando la posible salida a esta realidad tirana que se rie a carcajadas ("todo a pulmón" M.Rios) pasa por deshacer los nudos que nos atan desde la transición
Yo creo que hay palabras como "regenerar", "transformar", "vanguardia", "transversalidad", "coraje", "coherencia", "concordia", ..... que no entran en el lenguaje habitual de nuestros dirigentes gubernamentales.
Porque si vista la situación que todos conocemos y con el agravante de que a dos meses vista, las tensiones secesionistas y sobre nuestra deuda serán aún mayor si caben por los hechos a acontecer en dicho plazo, el Gobierno ni siquiera elige reaccionar agrupando a los partidos políticos con representación nacional en un Pacto como aquellos de antaño de 1977, no los llame bajo la bandera de la concordia y el espíritu de la responsabilidad de Estado, entonces es que seguimos oliendo todos a papeleta electoral y no resolviendo la crítica "papeleta" que nos deviene.
La solución tampoco pasa por derrocar el sistema, es una reacción primera, como la que cualquiera tiene ante un problema o crisis, pero en la meditación uno llega a encontrar que la democracia por más que no queramos admitirlo, no es el sistema que estamos viviendo, que pueda ser un clon de varias cosas que aspiraban a serlo, pero ningún español debe nada a otro por pertenecer a un determinado territorio, ni tampoco a los que matan por dejar de matar, lo que nos debemos son las leyes que nos permitan construir la democracia que España se merecería ser.
En esa labor, construyendo la democracia, caben todos. Lo que habría que rodear es la ley electoral, la no separación de poderes, la excesiva manipulación de algunos medios de comunicación y de la justicia, lo que habría que rodear es este establishment de a dos, y para poder llegar ahí hay mentalidades que actúan fuertemente como un cortafuegos además de intereses bancarios, políticos y de poder. Esas son las vallas que separan al pueblo de su futuro en democracia.
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